¿Qué es el trastorno obsesivo compulsivo (TOC)?
El TOC se caracteriza sobre todo por dos tipos de síntomas: las obsesiones y las compulsiones. Las obsesiones son pensamientos, imágenes o impulsos que le pasan por la cabeza a la persona con TOC, y que le resultan extraños o desagradables. Esta sensación de extrañeza o desagrado suele darse porque el pensamiento es sobre un tema que es muy importante para la persona (la posibilidad de contraer una enfermedad, que le suceda alguna catástrofe a alguien querido, etc.). No obstante, hay que aclarar que lo que es importante para una persona, puede no serlo para otra, o simplemente puede parecer exagerado, como por ejemplo el que una habitación está bien ordenada o que un objeto esté sucio o contaminado. Las compulsiones son los comportamientos que realizan las personas con TOC para combatir las obsesiones. Normalmente estos comportamientos están relacionados con las obsesiones, como por ejemplo limpiarse las manos un número de veces tras tocar un objeto “contaminado”, comprobar en varias ocasiones que una puerta está bien cerrada o que una luz está apagada, a pesar de que haya pocas dudas sobre ello, o pasar demasiado tiempo ordenando la habitación. Sin embargo, estos comportamientos también pueden no tener relación aparente con las obsesiones, como pasa con las supersticiones. Un ejemplo de este tipo de compulsiones sería golpear un objeto de madera tras haber tenido un pensamiento desagradable. |